Estudiantes de 5° Año del Colegio San José opinan:
La vida es uno de los valores más importantes y resulta ser, hoy en día, uno más del montón para jóvenes y no tan jóvenes. Este valor nos lo regala Dios y hoy podemos afirmar que este obsequio no es tomado en serio, pues a muchos les resulta más fácil acabar con la vida ante “problemas sin solución”. Se considera a la vida en gestación como algo que va y viene y que no modifica para bien la existencia de los otros, hasta podríamos decir que “molesta”…
Hoy el día en América Latina buscamos acabar con este valor. En Argentina se está tratando de aprobar la despenalización del aborto. Abortar va en contra de la moral y es una actividad delictiva, es un asesinato, con la diferencia de que la persona que sufre no está preparada para defenderse ni protestar.
¿Qué buscamos con esto?
Otro caso son las salidas de los jóvenes, donde hay adolescentes que buscan aislarse bebiendo desmedidamente alcohol o consumiendo estupefacientes y luego pueden suceder hechos lamentables: el de terminar con sus vidas o con las de otros.
Para concluir, quiero decir que los dueños del futuro somos nosotros los jóvenes y que no debemos esperar ese momento, sino desde ya ir perfeccionando el presente y así lograr un tiempo donde reine el bien común, donde todos defendamos la vida, “donde nadie pueda decidir por otros la forma de morir”, como dice Gabriel García Márquez en su ensayo “La soledad de América Latina”, para que de verdad reine el amor y alcancemos la felicidad.
Nicolás Tapia
El respeto a la vida en Latinoamérica ha cambiado, se están perdiendo los valores morales y éticos de la sociedad. Para empezar, ¿por qué estamos dejando de lado el respeto a la vida? ¿Cómo queremos un continente mejor si apoyamos leyes anti-vida como el aborto? Si bien la tasa de natalidad de nuestro continente ha aumentado en los últimos años, ¿es este un motivo para matar vidas inocentes que no pueden pelear por sus derechos? Estamos atacando a la vida desde su lugar más débil y esto debe cambiar. En varios países de América Latina se está tratando el tema de la despenalización del aborto, Como personas que nacimos y gozamos este don tan preciado de la vida, debemos afirmar nuestros ideales y no dejarnos influir.
La vida está en relación directa con la familia, entorno que sabemos que se está alterando debido a nuevas “leyes” a favor de la unión y adopción de personas del mismo sexo, estas leyes “anti - natura” hacen que de a poco se vaya perdiendo la dignidad y la naturaleza misma de la vida. El respeto a esta y a la familia, que son las bases fundamentales de cada persona, son intocables. Pensemos en nuestro futuro y en nuestros niños, que sufrirán las consecuencias de estos cambios.
Las personas que queremos cambiar este “nuevo estilo de vida” somos muchas, no propongo cambiar la naturaleza de los jóvenes pero sugiero modificar actitudes que a diario veo en la juventud de hoy
Para concluir, alguna vez dijo Gabriel García Márquez, “…todavía no es demasiado tarde para emprender la creación de la utopía contraria. Una nueva y arrasadora utopía de la vida, donde nadie pueda decidir por otros hasta la forma de morir”, y para ello el primer paso es salir de la ignorancia y apoyarnos en los principios morales de la vida, no dejando que nos inculquen ideas desde afuera personas que piensan desde siempre que este continente no puede estar a su nivel y no puede salir a flote por la simple razón de ser “latinoamericanos”. Que el orgullo propio de ser latinoamericanos haga nacer, desde lo más profundo de nuestro ser, las ganas y predisposición para cambiar y juntos, levantar la bandera del respeto a la vida para lograr una América mejor.
Sofía Torres
El aborto ¿Qué tema no? Ya se aprobó en Argentina la ley de matrimonio gay y se quiere despenalizar el aborto ¿Qué pasara ahora con tantas jóvenes embarazadas? Es una realidad que se ha prestado a muchas discusiones. Ahora Argentina pretende instalar esta norma tan cruel y homicida. Yo estoy convencido de que esto es un asesinato y que no ganamos nada matando una vida. Muchos matrimonios que no desean tener hijos y los adolescentes que no miden sus consecuencias al tener sexo deciden abortar. ¿A ellos les hubiese gustado que los maten cuando estuvieron en el vientre materno? Esa vida que se está gestando aunque no vea y no escuche, quiere ver la luz del mundo y no debemos matarlo. Por culpa del aborto no se respeta el derecho a la vida y las consecuencias que trae aparejado a las mujeres pueden ser físicas y psicológicas. Es importante resaltar esta frase de Laprovitta: “El aborto es la mejor expresión del fastidio, y a veces del odio contra el acto de Amor Creador de hacernos a imagen y semejanza del mismo Dios”, yo pregunto ¿A dónde va la humanidad con leyes como estas?
Para concluir, prometamos convertir nuestra comunidad en un nuevo Belén, en otro Nazaret.
Amémonos mutuamente como amamos a Jesús. En el hogar de Nazaret se respiraba amor, unidad, oración, sacrificio y trabajo infatigable, pero, sobre todo, una profunda comprensión, mutua estima, y permanente solicitud de todos por todos.
Leandro Orosco
Hoy el día en América Latina buscamos acabar con este valor. En Argentina se está tratando de aprobar la despenalización del aborto. Abortar va en contra de la moral y es una actividad delictiva, es un asesinato, con la diferencia de que la persona que sufre no está preparada para defenderse ni protestar.
¿Qué buscamos con esto?
Otro caso son las salidas de los jóvenes, donde hay adolescentes que buscan aislarse bebiendo desmedidamente alcohol o consumiendo estupefacientes y luego pueden suceder hechos lamentables: el de terminar con sus vidas o con las de otros.
Para concluir, quiero decir que los dueños del futuro somos nosotros los jóvenes y que no debemos esperar ese momento, sino desde ya ir perfeccionando el presente y así lograr un tiempo donde reine el bien común, donde todos defendamos la vida, “donde nadie pueda decidir por otros la forma de morir”, como dice Gabriel García Márquez en su ensayo “La soledad de América Latina”, para que de verdad reine el amor y alcancemos la felicidad.
Nicolás Tapia
El respeto a la vida en Latinoamérica ha cambiado, se están perdiendo los valores morales y éticos de la sociedad. Para empezar, ¿por qué estamos dejando de lado el respeto a la vida? ¿Cómo queremos un continente mejor si apoyamos leyes anti-vida como el aborto? Si bien la tasa de natalidad de nuestro continente ha aumentado en los últimos años, ¿es este un motivo para matar vidas inocentes que no pueden pelear por sus derechos? Estamos atacando a la vida desde su lugar más débil y esto debe cambiar. En varios países de América Latina se está tratando el tema de la despenalización del aborto, Como personas que nacimos y gozamos este don tan preciado de la vida, debemos afirmar nuestros ideales y no dejarnos influir.
La vida está en relación directa con la familia, entorno que sabemos que se está alterando debido a nuevas “leyes” a favor de la unión y adopción de personas del mismo sexo, estas leyes “anti - natura” hacen que de a poco se vaya perdiendo la dignidad y la naturaleza misma de la vida. El respeto a esta y a la familia, que son las bases fundamentales de cada persona, son intocables. Pensemos en nuestro futuro y en nuestros niños, que sufrirán las consecuencias de estos cambios.
Las personas que queremos cambiar este “nuevo estilo de vida” somos muchas, no propongo cambiar la naturaleza de los jóvenes pero sugiero modificar actitudes que a diario veo en la juventud de hoy
Para concluir, alguna vez dijo Gabriel García Márquez, “…todavía no es demasiado tarde para emprender la creación de la utopía contraria. Una nueva y arrasadora utopía de la vida, donde nadie pueda decidir por otros hasta la forma de morir”, y para ello el primer paso es salir de la ignorancia y apoyarnos en los principios morales de la vida, no dejando que nos inculquen ideas desde afuera personas que piensan desde siempre que este continente no puede estar a su nivel y no puede salir a flote por la simple razón de ser “latinoamericanos”. Que el orgullo propio de ser latinoamericanos haga nacer, desde lo más profundo de nuestro ser, las ganas y predisposición para cambiar y juntos, levantar la bandera del respeto a la vida para lograr una América mejor.
Sofía Torres
El aborto ¿Qué tema no? Ya se aprobó en Argentina la ley de matrimonio gay y se quiere despenalizar el aborto ¿Qué pasara ahora con tantas jóvenes embarazadas? Es una realidad que se ha prestado a muchas discusiones. Ahora Argentina pretende instalar esta norma tan cruel y homicida. Yo estoy convencido de que esto es un asesinato y que no ganamos nada matando una vida. Muchos matrimonios que no desean tener hijos y los adolescentes que no miden sus consecuencias al tener sexo deciden abortar. ¿A ellos les hubiese gustado que los maten cuando estuvieron en el vientre materno? Esa vida que se está gestando aunque no vea y no escuche, quiere ver la luz del mundo y no debemos matarlo. Por culpa del aborto no se respeta el derecho a la vida y las consecuencias que trae aparejado a las mujeres pueden ser físicas y psicológicas. Es importante resaltar esta frase de Laprovitta: “El aborto es la mejor expresión del fastidio, y a veces del odio contra el acto de Amor Creador de hacernos a imagen y semejanza del mismo Dios”, yo pregunto ¿A dónde va la humanidad con leyes como estas?
Para concluir, prometamos convertir nuestra comunidad en un nuevo Belén, en otro Nazaret.
Amémonos mutuamente como amamos a Jesús. En el hogar de Nazaret se respiraba amor, unidad, oración, sacrificio y trabajo infatigable, pero, sobre todo, una profunda comprensión, mutua estima, y permanente solicitud de todos por todos.
Leandro Orosco
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